lunes, 19 de noviembre de 2012

LA LITERATURA ERA ESTO


Hay dos tipos de escritores (de escritores dignos de ser leídos, se entiende). Está el escritor que trata de contar, lo mejor que puede, una buena historia. Si además cuenta esa historia mejor que nadie, será grande. El segundo tipo de escritor es ese otro que nos presenta como historia algo que realmente no lo es, o que, para ser más exactos, era imposible que lo fuera hasta que él decidió que lo sería. Si además demuestra que la historia no es más que una excusa para seguir avanzando, ese escritor será imprescindible.
Últimamente sospecho que las malas historias no existen. Existen los malos escritores (y los malos lectores).